El dolor del epicóndilo lateral del codo es una dolencia frecuente no sólo en el deportista, de compleja resolución ha sido abordada desde distintos enfoques terapeúticos. Causada principalmente por una sobrecarga de los músculos extensores de la mano, el lado afectado suele ser el de la mano dominante. Aunque multitud de métodos de tratamiento han sido propuesto, ninguno de ellos, sin embargo, puede garantizar el éxito.
El pack rehabilitador por excelencia cuando yo empezaba en esto, consistía en US, interferenciales y estiramientos de extensores en el mejor de los casos, añadiendo iontoforesis con fortecortín en los casos rebeldes, y recuerdo que los resultados eran bastante pobres.
Estudios recientes establecen que técnicas miofasciales son más efectivas en el control síntomatico de pacientes con esta patología que el US, utilizado como control en sujetos infórmaticos, lo siento por los detractores de la fascia (Ajimsha MS, 2012) y amantes del ultrasonido.
En relación a las técnicas de movilización (MWM), (Slater H et al., 2006) la utilizaron como una intervención dirigida a lograr la analgesia y la mejora de la fuerza de agarre en un estudio en sujetos sanos con epicondilalgia inducida experimentalmente por infiltración salina respecto a un grupo placebo, control. No se observaron diferencias entre los grupos en los perfiles de VAS, distribución del dolor, hiperalgesia inducida por tejido profundo o disminución de la fuerza, pre-post intervención. Estos datos sugieren que el deslizamiento lateral (MWM) no activa los mecanismos asociados con analgesia o el aumento de la fuerza de agarre en esto sujetos. En el año 2009, Vicencino B, et al., trataron de desarrollar una regla predictiva clínica para establecer la respuesta a la movilización y el ejercicio en pacientes con epicondilalgia lateral con resultados limitados.
En cuanto a la terapia manipulativa, que se que la estabais esperando, decir que, la manipulación de la columna cervical ha demostrado beneficios en relación al umbral de dolor a la presión en relación a la manipulación dorsal, sin embargo no hay cambios en relación a la fuerza de agarre o fuerza prensil, en pacientes con epicondilitis lateral (Fernández-Carnero J, Cleland JA, Arbizu RL, 2011). En estudios previos con aplicación sólo de manipulación cervical Fernández-Carnero, había comprobado básicamente lo mismo, mejoría al UDP y aumento de la fuerza de agarre del lado afecto. Con dos limitaciones a considerar, escaso número de pacientes y resultados inmediatos, es lo que hay.
En este sentido, (Cleland JA, Whitman JM, Fritz JM, 2004), en un estudio retrospectivo sobre unos 200 sujetos afectados de epicondilalgia lateral, valoraron los beneficios de la terapia manipulativa cervical y local en relación al abordaje exclusivamente local del codo.
Sesenta y uno de los 112 pacientes estaban en el grupo segundo, mientras que 51 recibieron abordaje local y manipulación cervical. Los resultados de estos análisis retrospectivos sugieren que la mayoría de los pacientes tuvieron beneficios con el tratamiento, independientemente de la inclusión de la terapia manual en la columna cervical. Sin embargo el grupo al que se le aplicó terapia manipulativa cervical registro mayor beneficio a largo plazo.
En 2004, Geldschläger S, realizó un estudio clínico controlado aleatorizado con 53 sujetos, donde trató de valorar los resultados del tratamiento osteopático respecto al tratamiento conservador. El tratamiento exclusivamente manual se hizo, con técnicas osteopáticas, estructurales, viscerales y craneosacrales, escogidas individualmente para cada paciente con epicondilitis lateral. El tratamiento ortopédico se realizó con técnicas quiroprácticas, antiflogísticos, y la mayoría con inyecciones de cortisona.
Cuatro pruebas comunes fueron utilizadas como varibles de estudio, umbral de dolor a la presión o PPT, Thomsen, prueba de extensión del dedo medio, y la prueba de
fuerza. Además, se pasó un cuestionario sobre las circunstancias concomitantes de la epicondilitis. Los resultados mostraron que la sensación subjetiva de dolor se redujo de 50% a 33% (p <0,01) en el grupo de intervención y del 48% al 32% (p = 0,03) en el grupo control. Pudiendo concluir que ambos grupos obtuvieron resultados positivos, y diferencias no significativas entre ellos, aunque con ahorro de corticoesteroides en el grupo que recibió osteopatía.
En 2011, González-Iglesias J et al, tuvo por objeto estudiar una serie de casos prospectivos y describir los resultados de un conjunto de escaladores con epicondilalgia lateral (LE), tratados de manera multimodal con terapia manual dirigido a la columna cervical codo, y muñeca, así como punto de disparo (TRP) punción seca y kinesiotape. Y observó que hubo una mejora en todas las medidas de resultado tanto en la visita final como a los 2 meses postratamiento, es decir respondieron correctamente al tratamiento.
Por tanto y en base a esto podemos concluir, todo lo que hacemos si está indicado y lo hacemos correctamente funciona, la inducción miofascial, la punción seca, el kinesiotape, el craneosacro, etc, lo que hacemos en consulta para tratar la epicondilitis y otras patologías, si lo hacemos con un objetivo e intención terapéutica claro vale, porque lo importante no somos nosotros sino el paciente. Me encanta esto que me ha salido de terapia multimodal, fuera etiquetas, y encasillamientos, hagan lo que quieran pero con conocimiento de causa, combinemos, seamos creativos, y que cada cual use aquello con lo que se encuentre cómodo y vaya más con su personalidad.
Utilicemos la evidencia para lo que sirve en favor de nuestros pacientes, y si ponemos ultrasonidos que sepamos que la terapia miofascial en la epicondilitis parece que funciona mejor, que combinar modalidades o técnicas distintas parece que mejora al paciente de manera más evidente, que la terapia de movilización del codo con objetivos analgésicos o de fuerza parece que no tiene mucho sentido, y que si manipulamos las cervicales del paciente si está indicado hacerlo, vamos a tener efectos más duraderos en el tiempo sobre el control sintomático de la epicondilitis lateral.
No utilicemos la evidencia para nuestra conveniencia, y recuerden que la crítica es fácil y la queja gratuita, lo importante es el paciente. Como siempre un placer compartir.